¿Se pregunta cómo funcionan los tribunales virtuales hoy en día? No es el único. Cada vez son más los tribunales y bufetes de abogados europeos que trasladan parte de su trabajo a Internet, no porque esté de moda, sino porque realmente funciona.
Las audiencias virtuales ayudan a los equipos a reunirse más rápido, evitar retrasos y reducir costes, y cuando se hacen con las herramientas adecuadas, cumplen plenamente el GDPR. Sin embargo, no todas las herramientas de vídeo están diseñadas para uso jurídico. En este artículo, veremos qué es realmente la videoconferencia en los tribunales, cómo funciona y por qué se está convirtiendo en una solución a largo plazo, no solo en un parche.
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Una sala de vistas virtual es un espacio digital seguro en el que se celebran procedimientos judiciales por videoconferencia. En lugar de reunirse en una sala física, los jueces, los abogados, los testigos y las partes se conectan en línea para tratar audiencias, mociones, deposiciones, etc.
Estas vistas virtuales no son charlas informales. Siguen los mismos procedimientos y el mismo decoro que un tribunal presencial, pero con mayor flexibilidad. Las pruebas se comparten a través de una pantalla, los asistentes esperan en vestíbulos digitales y se utilizan salas privadas para debates paralelos. Toda la experiencia se rige por estrictas leyes de protección de datos, especialmente la GDPR para los tribunales que operan en o con la Unión Europea.
La clave está en utilizar tecnología de vídeo de calidad judicial. No todas las herramientas de videollamada están diseñadas para el trabajo jurídico. Un sistema de sala de vistas virtual adecuado incluye:
Si se utiliza correctamente, esta configuración permite a los tribunales celebrar sesiones legales remotas y seguras sin sacrificar el proceso, la profesionalidad o el cumplimiento de las normas.
Un enlace de sala virtual es la URL única y segura que da acceso a cada participante a una vista a distancia.
Es como una llave digital, que sustituye a la puerta física de un tribunal, pero con mucho más control: sólo pueden acceder los participantes verificados, puede caducar automáticamente y está protegida mediante encriptación y acceso basado en funciones.
En resumen, es la puerta de entrada a una sesión judicial en línea conforme a las normas, segura y profesional.
Aquí es donde las cosas se ponen realmente difíciles. La seguridad no es sólo una característica; lo es todo, porque estamos hablando de asuntos jurídicos privados.
Analicemos qué hace que una plataforma de audiencias a distancia esté realmente preparada para los tribunales:
Todo lo que se comparte en la sala -vídeo, audio, archivos- debe estar cifrado de principio a fin. E2EE garantiza que ni siquiera el proveedor de la plataforma pueda acceder al flujo o al contenido. Sólo los participantes previstos pueden ver u oír lo que ocurre.
Para mantener fuera a los usuarios no invitados, la plataforma debe admitir:
No puede limitarse a enviar a alguien un enlace y dar por sentado que es quien dice ser. Las plataformas adecuadas le permiten verificar la identidad de los participantes antes o durante la sesión, para que el proceso sea responsable.
Especialmente en Europa, los sistemas de vídeo relacionados con los tribunales deben cumplir estrictas normas de protección de datos:
Si su plataforma almacena datos en nubes con sede en EE.UU. o carece de registros de auditoría, ya es una responsabilidad. Consulte nuestra Lista de comprobación de 10 pasos: Cómo cumplir con el GDPR.
¿Dónde utilizan los abogados la tecnología de las salas de vistas virtuales? Ya no se trata solo de una solución, sino de una parte integral del funcionamiento de muchos equipos jurídicos. Las videoconferencias seguras se han convertido en una herramienta cotidiana para los tribunales y bufetes de abogados de toda Europa.
La clave está en utilizar el software adecuado: videoconferencias diseñadas específicamente para flujos de trabajo jurídicos. Una plataforma jurídica adecuada garantiza la seguridad, el cumplimiento y la fiabilidad, tanto si se trata de hablar con un cliente de forma confidencial como de organizar un complejo testimonio a distancia.
Los profesionales del Derecho ya están utilizando las salas de vistas virtuales en la práctica real:
¿Por qué cada vez más jueces y abogados quieren utilizar esta tecnología? Porque tiene un montón de grandes beneficios, como hacer que el trabajo jurídico sea más fácil, más barato y más accesible. No es sólo una herramienta técnica; ¡también te ayuda a ejercer!
En Derecho, el tiempo es oro. Los hipervínculos ahorran mucho tiempo:
Esta tecnología permite participar a personas que antes se enfrentaban a barreras.
La vida pasa y a veces complica las cosas.
Aunque la seguridad es esencial, los formularios digitales también pueden simplificar las cosas:
En general, el uso de la sala de vistas virtual no consiste sólo en utilizar las nuevas tecnologías, sino en hacer que el sistema judicial funcione mejor e incluya a más personas.
Depende - pero en muchos casos, el tribunal virtual es realmente más rápido que los procedimientos en persona.
Las sesiones judiciales tradicionales suelen conllevar largas esperas, retrasos entre casos y horas perdidas en desplazamientos y logística. Las vistas virtuales eliminan muchas de esas fricciones.
Esto es lo que solemos ver en las sesiones judiciales a distancia:
Tipo de sesión |
Duración típica |
Tiempo ahorrado en comparación con una sesión presencial |
Audiencia |
10-30 minutos |
1-2 horas de viaje y espera |
Conferencia sobre el estado de la causa |
15-20 minutos |
A menudo disponible el mismo día |
Consulta con el cliente |
30-60 minutos |
Horario flexible |
Declaración de testigos |
60-120 minutos |
Sin coordinación del transporte |
Sesión de mediación (ADR) |
1-3 horas |
Puede desarrollarse continuamente en línea |
Por supuesto, los juicios complejos o los litigios entre varias partes siguen llevando tiempo, pero para asuntos rutinarios, los tribunales virtuales pueden avanzar mucho más rápido.
Recibirá un enlace único y seguro a la sala de vistas por correo electrónico o invitación de calendario, a menudo con una función ya asignada (por ejemplo, "participante", "moderador" o "testigo").
No es necesario descargar nada. Basta con hacer clic en el enlace desde un ordenador portátil o una tableta con cámara y micrófono. Para obtener mejores resultados, utilice Chrome o Firefox.
Algunos tribunales le pedirán que confirme su identidad, ya sea mediante un código de acceso, un correo electrónico preaprobado o un registro ante un secretario o agente judicial.
Una vez dentro, aterrizarás en una sala de espera. Un moderador o juez le permitirá entrar en la sesión cuando llegue el momento.
Hable, presente documentos o escuche, igual que lo haría en persona. El juez controla el desarrollo de la sesión y todo está protegido y grabado si es necesario.
Cuando termina la vista, puede abandonar la sala con un solo clic. Si es necesario un seguimiento, suele organizarse de inmediato.
¿Qué significa todo esto para la "sala virtual"? Está claro que esta tecnología ha demostrado ser algo más que una solución rápida de hace unos años; se ha ganado su lugar como parte constante de la caja de herramientas de un abogado. Tiene demasiadas ventajas reales en términos de rapidez, coste y facilidad de uso como para que se la ignore.
Podemos esperar que estas herramientas sigan haciéndose más inteligentes y seguras en el futuro. A medida que cambien las amenazas, las funciones se adaptarán y la seguridad se reforzará aún más. También funcionarán mejor con otros programas informáticos jurídicos de los que ya disponga, como las herramientas de e-discovery o los sistemas de gestión de casos, haciendo que su proceso esté más conectado.
Dicho esto, no se trata de sustituir todo lo real. En el mundo jurídico, la gente seguirá encontrando el mejor equilibrio entre utilizar enlaces virtuales cuando tengan sentido y ofrezcan ventajas y saber cuándo es fundamental o mejor reunirse o hablar en persona.
Las salas de vistas virtuales no son el futuro: ya están aquí. La única cuestión es si su equipo está utilizando la herramienta adecuada para el trabajo.
Con Digital Samba, puede hacerlo:
No necesita comprometerse ni configurar nada. Le mostraremos cómo funciona, responderemos a sus preguntas e incluso le dejaremos probarlo en un entorno sandbox. Regístrese para obtener una cuenta gratuita y empiece a crear su sala de vistas virtual.